¿Noche estrellada?
Anoche no había luna, estaba nublado y tampoco se veían las estrellas. Fue una noche de salsa, de discoteca, y de caricias y besos a la orilla del mar, envueltos por la niebla, hasta que se nos hizo de día. Caricias y besos conocidos, pero diferentes: más maduros, y por lo tanto, más dulces, sorprendentemente dulces y tiernos.
Si, has cambiado. Pero no en todo, ¿verdad, amor? Qué miedo me da todo esto…
8 comentarios:
Ay ay ay que no se te puede dejar sola...
besicos.
Jajaja, hombre, un poquito sola de vez en cuando si, porfaaaaaaa
Besotes
¿pero qué estamos haciendo?
¿v olvemos a las raices?
no era eso una vuelta al sufrimiento?
Uy Pablo... no, las que se tenían que olvidar eran otras, éstas no se han olvidado nunca, no dejaron cicatrices, sólo unos recuerdos preciosos (aunque no tenga muy claro donde me estoy metiendo ahora) ;-)
Un besazo
Vaya, y yo que me hacía ilusiones, jajajajaja.
¿Quién dijo miedo? ¡Adelante, tenemos una sola vida y la felicidad es escurridiza!
Ulises, miedo, no... pánico escénico.
Besikis
Envoltada de boira baixa, rínxols per donar i per vendre...Jajajaja...!!! I tan bé que t´havia quedat el pentinat...
Petons.
Vio: Mira que ets dolenta... No es pot explicar-te res! El títol també podria haver estat: "Y yo con estos pelos", jajaja!!!!!!!!!!!!!!!
Un petonàs
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