lunes, julio 31, 2006

Ya me lo advirtieron

Hoy me he enternecido leyendo el blog de un amigo, que hablaba de su abuelita con Alzheimer, y me los imaginaba tiernamente paseando, ella esforzándose por recordar, él, no importándole que no le llame por su nombre. Es triste, pero es bueno saber que tienes alguien al lado en esos momentos. Un petonet , carinyo.

Existe otra enfermedad parecida al Alzheimer, que afecta a personas de todas las edades, pero afecta de una manera sospechosamente selectiva y parcial: no se acuerdan de lo que no les interesa, olvidan besos tiernos, olvidan sonrisas y risas, olvidan abrazos en el parque, o si no los olvidan, los aparcan, como a Woody cuando aparece Buzz Lightyear (en Toy Story, para los no versados), el nuevo juguete tiene nuevas prestaciones, habla, tiene luz, y se olvidan de las noches de tormenta en que se abrazaban a la antigualla de Woody, que siempre estuvo a su lado compartiendo muchos momentos de alegrías.

Lo único que me consuela es que Buzz va a pilas, y, como hacen los niños, cuando las pilas se acaban... vuelven a Woody, un sencillo vaquero de madera, pero que no por ello se pasan con él momentos aburridos. Otros, más espabilados, compran un paquete de pilas Duracell o se las quitan a otro juguete. Qué le vamos a hacer. Ya me lo advirtieron.

miércoles, julio 26, 2006

Cuatro meses

Ya sé, en un blog se debería escribir cada día, o casi, y ¡han pasado cuatro meses! Así, sin darme cuenta. Es que el Dragon-Khan, comparado con mi vida en estos últimos tiempos, es un vulgar tiovivo.

Han pasado demasiadas cosas para explicarlas ahora, en un plis-plás, pero ninguna mala, la verdad. Extrañas, si, otras divertidas, muy divertidas, otras bonitas, pero supongo que lo importante de todo esto es que vuelvo a ser yo, aunque no tengo ni idea de dónde estoy o hacia dónde voy, pero estoy y tengo ganas de ir, que es lo que importa, dónde... el tiempo dirá, o, como dice Scarlett, ya lo pensaré mañana. Quiero vivir el hoy, ya me perdí demasiados días, y si algo he aprendido, es que el sol siempre vuelve a salir, sólo hay que apartar las nubes que lo tapan.